Un primer aspecto, que no es quizás el que más se esté poniendo de relieve, es el de la información. Estamos acostumbrados a mantenernos al día sobre lo que sucede en el mundo desde soportes digitales, pero el hecho de que, en momentos como estos, con tal cantidad de noticias, datos, entrevistas, comparecencias y los picos de tráfico de que ello conlleva, podamos seguir haciéndolo con total normalidad, es fundamentalmente gracias a las nuevas tecnologías y a su sólida estructura de redes. Tema aparte merece el hecho de que, en ocasiones, esto puede conducir a una sensación de sobreinformación o que, precisamente esa inmediatez en la información que facilitan las tecnologías puede dar lugar a problemas graves como la divulgación de bulos a escala.
El sector educativo también se está valiendo de la tecnología mediante el uso de plataformas y otros medios para que alumnos y profesores puedan continuar con el curso académico digitalmente. Las tecnologías de comunicación están siendo claves para permitir el contacto entre las personas, tanto a nivel personal como profesional. De nuevo en este ámbito, el sistema está mostrando su eficiencia a la hora de dar respuesta tales incrementos de tráfico de datos.
"No podemos olvidarnos del papel que están jugando las tecnologías en el propio ámbito sanitario y de seguridad de esta crisis. Son muy numerosos los casos de tecnologías aplicadas a la lucha contra el virus y a la contención de su propagación: la impresión 3D ayuda a fabricar válvulas, respiradores y ventiladores para cubrir las carencias de suministros en los hospitales o a producir nuevos modelos de máscaras protectoras para los profesionales sanitarios; la ciberseguridad también está siendo vital a la hora de responder ante ataques como los sufridos por los sistemas públicos de salud, el robo de datos o la divulgación de bulos a escala u otras vulnerabilidades informáticas derivadas de una dependencia tecnológica, mayor si cabe en situaciones de debilidad colectiva como esta; la inteligencia artificial y el análisis de datos a analizar y comprender el comportamiento del virus y la evolución de la pandemia así como a controlar los desplazamientos y rastrear brotes a partir de aplicaciones y el GPS, a través de modelos de tratamiento de datos y predicciones.
Este es tan solo un pequeño recorrido por unos pocos casos, seguramente los más evidentes, en los que la tecnología está resultando crucial a la hora de afrontar algunos de los diversos efectos de esta crisis. Aunque se trate de un breve repaso, puede resultar suficiente para apreciar la transversalidad que caracteriza a las nuevas tecnologías, con presencia en todos y cada uno de los sectores.
"La tecnología no es nada. lo importante es que tengas fe en la gente, que sean básicamente buenas e inteligentes, y si les das herramientas, harán cosas maravillosas con ellas". Steve Jobs